La carne es, sin duda, uno de los productos alimenticios por excelencia y un protagonista frecuente en las mesas familiares. Además, la ganadería es uno de los mercados de exportación más rentables.
Como cualquier otra actividad económica importante, la ganadería tiene un impacto importante en el medioambiente. Su productividad y competitividad han puesto sobre la mesa nuevos debates relacionados con el desarrollo sostenible, la deforestación y qué tan beneficioso sigue siendo esta práctica para el planeta.
Dentro de este no tan nuevo debate, ganan protagonismo acciones amigables que, desde la ganadería, comienzan a favorecer los ecosistemas naturales en donde se llevan a cabo. En este artículo los exploraremos.
Ganadería vs ganadería sostenible
La ganadería es una de las actividades económicas más antiguas de la humanidad. Desde el Neolítico, la integración de la ganadería y otras prácticas como la agricultura han contribuido a diseñar y conservar el medio ambiente que ahora conocemos.
¿En qué consiste? La ganadería consiste en el manejo y la cría de animales, con fines de utilizar su carne y otros de sus productos como leche, huevos o cueros. Habitualmente se trata de animales domesticables.
Los principales tipos de ganado son:
- Bovino o vacuno (bueyes, toros y vacas)
- Ovino (ovejas)
- Porcino (cerdos)
- Caprino (cabras)
- Equino (caballos, mulas y burros)
En categorías aparte, figuran:
- La avicultura (cría de aves)
- Piscicultura (cría de peces)
- Apicultura (cría de abejas)
- Cunicultura (cría de conejos)
Por su parte, la ganadería sostenible es aquella que no recurre a químicos ni hormonas en el tratamiento de los animales. Esta se preocupa por el nivel de emisiones y racionaliza el uso de los recursos naturales. Por ello, los productos procedentes de estas ganaderías, como por ejemplo la carne y la leche, son más amables con la naturaleza.
En la ganadería sostenible se puede analizar la preservación del capital social, humano, artificial y natural. A nivel social significa entender y aplicar varios conceptos como equidad, solidaridad y seguridad social. Dentro de la ganadería sostenible se considera importante analizar el conocimiento local, la seguridad alimentaria y la integración de las familias en el proceso productivo.
Importancia de la ganadería
La ganadería fue (y sigue siendo) una actividad sumamente importante en el desarrollo de la humanidad. No es gratuito que ocupe un lugar destacado entre las actividades primarias de la economía mundial.
Provee productos alimenticios que forman parte de la dieta cotidiana de la población, como carnes de distinto tipo y de otros productos derivados. La población mundial puede crecer en parte gracias a la expansión también de la industria ganadera, lo cual a su vez posee un impacto en otras áreas de la existencia.
Centroamérica destina aproximadamente un 27% de su territorio a la ganadería bovina. El inventario de animales en esta región es sobre nueve millones de cabezas, las cuales se desarrollan en unas 400.000 fincas, donde se practica la ganadería extensiva.
¿Y qué pasa con el medioambiente?
Queda claro que la actividad agraria favorece el desarrollo económico, pero también puede alterar el equilibrio entre los sistemas agrícola y ganadero causando impactos significativos sobre el medio ambiente. Por tanto, se hace necesario adoptar medidas especiales que ayuden a reducir estos impactos.
En este sentido, el respeto al medio ambiente es uno de los pilares del desarrollo sostenible y una de las prioridades en la búsqueda de una agricultura multifuncional al servicio de sus ciudadanos, siendo además un elemento clave para la lucha contra el cambio climático.
La aplicación de principios de gestión sostenible de los recursos naturales y los subproductos generados por la actividad primaria (en particular, la ganadería) es la respuesta a esta creciente demanda ambiental, lo cual supone un esfuerzo importante para el sector y las administraciones.
Y… ¿En qué se beneficia el medio ambiente?
1. Diversos estudios muestran que cambiando la dieta del ganado e inclusive usando genotipos de animales adaptados, las emisiones se reducirían de manera considerable.
2. Convierte forrajes, residuos de cultivos y productos agrícolas en carne y leche por su condición de rumiantes.
3. Conservación de pasturas no solo para alimentar reses sino para que capturen el gas que emiten las vacas en producción.
4. Otros beneficios de la agricultura sostenible son: reducción de la erosión del suelo, y con ello de los costos de mantenimiento de caminos, embalses y centrales hidroeléctricas. Mejora de la calidad del agua y del aire.
5. Aumento de la biodiversidad.
6. Retención de carbono.
En Somex Guatemala creemos en una ganadería equilibrada con el medio ambiente. Somos conscientes del impacto que esta actividad crea en nuestros ecosistemas y, por eso, trabajamos con fuertes valores éticos y ambientales que nos permiten desarrollar una ganadería responsable, ofreciendo a nuestros animales una vida sana y digna. Para conocer cómo lo hacemos, solo contáctanos.